viernes, 22 de marzo de 2013

PROCEDIMIENTO SERIGRÁFICO (MALLAS, SEDA)


La pantalla es la base de la serigrafía. Está formada por un tejido (especialmente confeccionado) tensado sobre un marco. Este tejido es el elemento primordial para la correcta impresión puesto que ésta se hace a través de la malla de dicho tejido y esto es así por varias razones:

1 Porque es lo que ha dado nombre a la serigrafía.
 2 Condiciona las características del trabajo a imprimir.
3 Determina la calidad del trabajo impreso.

Tal es la importancia de este elemento que se estudiará en primer lugar antes  que cualquier otro. Como ya se vio en el capítulo anterior, los tejidos naturales como el organdí o la gasa de seda fueron los utilizados originariamente por la serigrafía. Tras la Segunda Guerra Mundial, se empezaron a utilizar los tejidos sintéticos.

MALLAS SINTÉTICAS

Las fibras sintéticas se podrían agrupar en dos grandes grupos; las poliamidas (Nylon)  los poliésteres (Terylene). Estas fibras ofrecen una serie de ventajas como son:

1.    Son fibras monofilamento y de muy poco grosor, por lo que se pueden confeccionar mallas muy finas.

2.    Gran resistencia al desgaste mecánico lo que supone mayor durabilidad.

3.    Gran estabilidad dimensional (especialmente el poliéster)

4.    Resistencia a la abrasión tanto de los productos químicos utilizados en su recuperación y limpieza como el de los disolventes.

5.    Gran uniformidad en su fabricación pudiendo conseguir tejidos de gran finura.

CLASIFICACIÓN DE LAS MALLAS

Las mallas sintéticas se clasifican según dos parámetros:

1.    Por el número de hilos por centímetro de borde del tejido que varía de 12 a 200.

2.    Según el grado de densidad de los hilos, se nombra con las letras:
·         HD Fibra espesa y fuerte
·         T Fibra normal
·         M Fibra mediana
·         S Fibra ligera de diámetro pequeño

Con la combinación de estos dos parámetros, se definen las diferentes mallas. Cuanto mayor sea el número de hilos, el grado será más ligero. La densidad de la malla determina el tamaño de la abertura de ésta. A mayor densidad menor abertura.


SELECCIÓN DE LAS MALLAS

Dada la gran cantidad de tipos y calidades de mallas existentes, es importante la elección correcta de éstas para conseguir buenas estampaciones. Para la correcta selección de la malla, se han de tener en cuenta fundamentalmente dos consideraciones:

1º El depósito de tinta
2º La imagen a reproducir

EL DEPÓSITO DE TINTA
La densidad de las mallas tiene una relación directa sobre el depósito de tinta. Para conseguir depósitos elevados, se deberá seleccionar un grado de densidad HD y número de hilos 100 o inferior. Para imprimir con tintas textiles con partículas de pigmentos gruesos, son necesarias también mallas de baja densidad (40 T a 77 T).
Si por el contrario lo que deseamos es un depósito de tinta fino o reproducción de colores translúcidos, utilizaremos los tipos de malla ligera (S) y con número de hilos 120 ó superiores.

LA IMAGEN A REPRODUCIR
Es el segundo factor que influye en la elección de la malla, dependiendo de las cualidades del cliché. Para clichés de trama o trazos finos conviene elegir mallas de 100 hilos/cm. o superiores y densidad T. Como regla general se debe tener en cuenta lo siguiente: el diámetro del hilo no debe ser mayor que el punto más pequeño de la trama a reproducir pues puede que la dimensión del hilo coincida con la del punto quedando éste superpuesto y por consiguiente bloqueado produciendo entonces fallos en la reproducción de tramas finas. Vamos a enumerar a continuación los tipos de malla más frecuentemente usados en serigrafía.

MALLAS DE POLIAMIDA (NYLON)
Tienen gran resistencia al desgaste y a la abrasión así como a los productos químicos y disolventes. Su elasticidad las hace muy útiles para la impresión de objetos con superficies desiguales.

MALLAS DE POLIÉSTER
Mejor estabilidad dimensional que el Nylon, ofrece mayor resistencia al tensado lo que le hace ser el más comúnmente utilizado en la impresión serigráfica. De superficie lisa, estructura regular y fácil limpieza. Tanto el Nylon como el Poliéster, se pueden presentar en el mercado coloreados. Este teñido (amarillo, naranja o rojo), mitiga el efecto de dispersión de la luz en la exposición directa a los rayos ultravioletas, absorbiendo dicha radiación U.V. Cuando se emplean este tipo de mallas, los tiempos de exposición sufrirán incrementos de entre el 50 y 100 %.

POLIÉSTER METALIZADO
Para trabajos que requieran gran precisión y estabilidad dimensional como la impresión de circuitos impresos. Son mallas de Poliéster tratadas con níquel después de haber sido tejidas. El metalizado hace que la electricidad estática generada por la fricción de la rasqueta contra el tejido sea expulsada a través de éste al actuar como conductor eléctrico. Estas mallas también se emplean en impresiones con tintas termoplásticas (han de calentarse durante la impresión).

MALLAS ANTIESTÁTICAS
Creadas a base de mezcla de Poliéster y un Nylon carbonizado, lo que hace que la electricidad estática se descargue de la pantalla facilitando la impresión de materiales plásticos y evitando que las partículas de polvo se adhieran a los mismos impidiendo su impresión.

MALLAS CALANDRADAS
Mallas creadas para reducir el depósito de tinta cerca del 50 %. Empleadas principalmente para imprimir con tintas U.V. (100 % de contenido sólido). Se consiguen aplanando una de las caras de la malla al pasar rodillo o calandras calientes sobre su superficie.

MALLAS DE ACERO INOXIDABLE
Empleadas en aplicaciones industriales para impresiones de gran precisión (circuitos impresos) y depósitos altos de tinta. También se emplean en decoración de cristal, cerámica y porcelana, así como con tintas termoplásticas. Sin embargo su precio es muy elevado así como su vulnerabilidad al roce dada su poca elasticidad. Para su tensado se requiere equipo especial.

MALLAS DE POLIÉSTER DE ALTA TENSIÓN (HIGH TECH)
Recientemente desarrolladas, estas mallas están dotadas de una mayor resistencia a la extensión alcanzando niveles de tensión superiores a las mallas convencionales (hasta 100 newton/cm.) a la vez que la pérdida de tensión por el uso es sensiblemente inferior. A estas dos anteriores ventajas habría que sumar una reducción de la  distancia de contacto (espacio entre la malla y la superficie a imprimir) lo que conllevaría un mejor registro junto con una mejor calidad de impresión ya que reduce el nivel de fricción de la rasqueta contra la malla redundando a su vez en una mayor durabilidad de ésta.

APLICACIONES DE LA SERIGRAFIA


Sería difícil llegar a un detalle completo de todas ellas, ya que evoluciona de forma continua precisamente por sus posibilidades de aplicación en cualquier tipo de soporte. Por tanto, vamos a detallar sólo las más utilizadas:

- En la reproducción de obras de arte.

- Pinturas, dibujos, carteles, etc.
 
- En la estampación de tejidos. 

- Camisetas, vestidos, telas, corbatas, material de deporte, calzado, lonas, y en todo tipo de ropa.

- En la impresión de plásticos. - Marquesinas, paneles, elementos de decoración, placas de señalización y marcaje, tableros de control, etc.

- En la impresión de madera y corcho, para elementos de decoración, puestas, muebles, paneles, etc.

- En la impresión de calcomanías y pegatinas. 


- Calcomanías al agua y secas, pegatinas en complejos o materiales autoadhesivos (papel y cloruros de polivinilo), calcomanías vitrificables para la decoración de azulejos, vidrio y
cerámica.

- Decoración de cristal, para espejos y material, para todo tipo de máquinas recreativas y de juego, y en cilíndrico para frascos, botellas, envases, jeringuillas, ampollas, vasijas, etc.

- Para el flocado de todo tipo de materiales, en este caso el adhesivo se aplica también por serigrafía.

- En la producción de cartelería mural de gran formato, las vallas de publicidad exterior, por la resistencia de las tintas a los rayos ultravioleta.

- En todo tipo de materiales para decoración de escaparates, mostradores, vitrinas,  interiores de tiendas, y, en cualquier escala, elementos de decoración promocionales y publicitarios.

- Decoración directa por medio de esmaltes y vitrificables de barro, cerámica, porcelana, etc.

- Etiquetas en aluminio, cartulinas, cueros, tejidos, etc. 

- Producción de circuitos impresos. 

- Decoración de corcho y madera.
 
- Rotulación y marcaje con transportadores para vehículos y material de automoción.
- Impresión de cubiertas para carpetas, libros, etc.

HISTORIA DE LA SERIGRAFIA


No se conoce con exactitud el lugar, ni la época, ni quién inventó este sistema de impresión, muy diferente de todos los sistemas convencionales que se han ido desarrollando a partir del descubrimiento de la imprenta. La Serigrafía es un procedimiento de impresión que consiste en el paso de la tinta a través de una plantilla que sirve de enmascaramiento, unida a una trama tensada en un bastidor. Desde este planteamiento, siempre se ha pensado que el origen de la serigrafía es el estarcido, es decir, la impresión de dibujos o imágenes, elementos decorativos, letras, etc., dibujados previamente sobre una plantilla que, colocada sobre una superficie, permite el paso de la pintura o tinta a través de las partes vaciadas, pasando por encima una brocha, rodillo o racleta. 

El descubrimiento del estarcido se remonta a miles de años antes de Jesucristo, pues se ha comprobado que muchas pinturas encontradas en cuevas prehistóricas fueron hechas espolvoreando tierras coloreadas muy molidas sobre bases puestas previamente sobre las paredes. Los antecedentes más antiguos de este sistema se han encontrado en China, Japón y en las islas Fidji, donde los habitantes estampaban sus tejidos usando hojas de plátano, previamente recortadas con dibujos y que, puestas sobre los tejidos, empleaban unas pinturas vegetales que coloreaban aquellas zonas que habían sido recortadas. Posiblemente la idea surge al ver las hojas de los árboles y de los arbustos horadadas por los insectos. En Egipto también se usaron antiguamente los estarcidos para la decoración de las Pirámides y los Templos, para la elaboración de murales y en la decoración de cerámica y otros objetos. La llegada a Europa a partir del año 1.600 de algunas muestras de arte japonés, permitió comprobar que no habían sido hechas con el sistema de estarcido, sino con plantillas aplicadas sobre cabellos humanos muy tensados y pegados sobre un marco rectangular. 

Tanto en el procedimiento de la serigrafía como en el del estarcido, la mayor dificultad era la necesidad de puentes para sujetar las partes interiores de dibujos o letras en su sitio exacto, y ésta solamente podía ser evitada con un segundo estarcido.

La aplicación del sistema de impresión por serigrafía como base de la técnica actual, empieza en Europa y en Estados Unidos a principios de nuestro siglo, a base de plantillas hechas de papel engomado que, espolvoreadas con agua y pegadas sobre un tejido de organdí (algodón) cosida a una lona, se tensaba manualmente sobre un marco de madera al que se sujetaba por medio de grapas o por un cordón introducido sobre un canal previamente hecho en el marco.  Colocada encima la pintura o la tinta, se arrastraba y presionaba sobre el dibujo con un cepillo o racleta de madera con goma o caucho, y el paso de la tinta a través de la plantilla permitía la reproducción de las imágenes en el soporte.
Con esta técnica se empezó, en un principio, a estampar tejidos, sobre todo en Francia, dando origen al sistema de estampación conocido por "estampación a la Lyonesa", con características parecidas pero diferentes al sistema de serigrafía.

La invención de una laca o emulsión que permitía sustituir el papel engomado sobre el tejido con una mayor perfección en la impresión, inició el rápido desarrollo de este procedimiento.
Al principio, pequeños talleres en Europa y en Estados Unidos que aparecían con gran rapidez, empezaron a realizar los primeros trabajos. Inicialmente, lo que parecía un sistema elemental de reproducción animó a muchas personas a empezar estos trabajos; sin embargo, la falta de técnica y de medios y el no proseguir con las investigaciones necesarias para la mejora del procedimiento, los desanimaba hasta que lo dejaron definitivamente. En el transcurso de la 2ª Guerra Mundial, los Estados Unidos descubrieron lo apropiado de este sistema para marcar material bélico tanto en las fábricas como en los propios frentes de guerra, habiéndose encontrado restos de talleres portátiles una vez acabada la contienda.

El desarrollo de la Publicidad y el trabajo industrial en serie a partir de los años 50, convirtieron a la serigrafía en el sistema de impresión indispensable ALTEBROWN 4 para todos aquellos soportes que, por la composición de su materia, forma, tamaño o   aracterísticas especiales, no se adaptan a las máquinas de impresión de tipografía, offset, huecograbado, flexografía, etc. La impresión por serigrafía es el sistema que ofrece mayores posibilidades, como iremos viendo posteriormente, pues prácticamente no tiene ningún tipo de limitaciones. 

La palabra serigrafía tiene su origen en la palabra latina "sericum"(=seda) y en la griega "graphé" (=acción de escribir, describir o dibujar). Los anglosajones emplean el nombre de Silk-screem (pantalla de seda) para las aplicaciones comerciales e industriales, y el de Serigrafía para la reproducciones artísticas, aunque en la actualidad se ha impuesto este último para todas las técnicas de impresión que tienen su origen en el tamiz, sea del material que sea: orgánico, sintético, metálico, etc. Este sistema, por sus especiales características, permite imprimir sobre cualquier soporte: blanco, transparente o de color, grueso o fino, áspero, rugoso o suave, de forma regular o irregular, mate, semimate o brillante, pequeño o grande, de forma plana o cilíndrica, y se pueden emplear todo tipo de tintas, previamente formuladas de acuerdo con los materiales en los que se va a imprimir, con diferentes gruesos de capa por depósito de tinta, calidades opacas, transparentes, mates, semimates, brillantes, fluorescentes, reflectantes, barnices y lacas, vinílicas, acrílicas, gliceroftálicas, catalípticas o de los componentes, al agua, etc. Se aplica sobre cualquier tipo de material:
papel, cartulina, cartón, cuero, corcho, metal, madera, plástico, cristal, telas orgánicas o sintéticas, fieltro, cerámica, etc., y sin ninguna limitación en el número de colores planos o tramados, pudiendo hacerse la impresión manual o por medio de máquinas.
Hoy día la perfección de este sistema es prácticamente absoluto, teniendo mayor calidad cromática y resistencia que otros sistemas más conocidos y la única limitación en la impresión de colores tramados o cuatricomías es la lineatura que se emplee en la selección.
La aparición de los tejidos de poliéster, mallas metálicas de gran finura y resistencia, emulsiones y películas para clichés, ha permitido lograr una perfección en la impresión que la coloca en igualdad de condiciones con otras técnicas más sofisticadas y costosas.
Aplicaciones. Sería difícil llegar a un detalle completo de todas ellas, ya que evoluciona de forma continua precisamente por sus posibilidades de aplicación en cualquier tipo de soporte. 

Por tanto, vamos a detallar sólo las más utilizadas:
- En la reproducción de obras de arte. - Pinturas, dibujos, carteles, etc.
- En la estampación de tejidos. - Camisetas, vestidos, telas, corbatas, material
de deporte, calzado, lonas, y en todo tipo de ropa.
- En la impresión de plásticos. - Marquesinas, paneles, elementos de decoración,
placas de señalización y marcaje, tableros de control, etc.
- En la impresión de madera y corcho, para elementos de decoración, puestas,
muebles, paneles, etc.
- En la impresión de calcomanías y pegatinas. - Calcomanías al agua y secas,
pegatinas en complejos o materiales autoadhesivos (papel y cloruros de
polivinilo), calcomanías vitrificables para la decoración de azulejos, vidrio y
cerámica.
- Decoración de cristal, para espejos y material, para todo tipo de máquinas
recreativas y de juego, y en cilíndrico para frascos, botellas, envases,
jeringuillas, ampollas, vasijas, etc.
- Para el flocado de todo tipo de materiales, en este caso el adhesivo se aplica
también por serigrafía.
- En la producción de cartelería mural de gran formato, las vallas de publicidad
exterior, por la resistencia de las tintas a los rayos ultravioleta.
- En todo tipo de materiales para decoración de escaparates, mostradores,
vitrinas, interiores de tiendas, y, en cualquier escala, elementos de decoración
promocionales y publicitarios.
- Decoración directa por medio de esmaltes y vitrificables de barro, cerámica,
porcelana, etc.
- Etiquetas en aluminio, cartulinas, cueros, tejidos, etc.
- Producción de circuitos impresos.
- Decoración de corcho y madera.
- Rotulación y marcaje con transportadores para vehículos y material de
automoción.
- Impresión de cubiertas para carpetas, libros, etc.